miércoles, 9 de enero de 2013

AMAZON Y LAS CRÍTICAS LITERARIAS SESGADAS

Rodeado de gran secretismo, Amazon ha iniciado en los últimos meses la eliminación de las “reseñas interesadas” de los libros que comercializa. El secreto ha dejado de ser tal gracias a los comentarios de los lectores, aunque se desconoce el criterio a seguir.
En el momento actual, cuando la crítica literaria tradicional está en entredicho, esta multinacional  se dio cuenta desde el primer momento que las recomendaciones y valoraciones positivas de sus libros se traducían en un incremento de las ventas.
 Las primeras reseñas procedían de lectores bien intencionados, pero muy pronto se puso en evidencia que la mayor parte de las críticas que se recibían en la web eran interesadas, ya que procedían de los propios autores para promocionar sus libros y, en ocasiones, despreciar los de otros, o bien de amigos o parientes del autor.  
La situación se agravó cuando empezaron a crearse agencias que ofrecían a autores y editores servicios consistentes en paquetes de reseñas a un precio aceptable. De este modo, en las librerías on-line para las que trabajaban destacaban un título con múltiples reseñas favorables y en poco tiempo lo convertían en un éxito de ventas.
Por lo que a España se refiere, no hemos sufrido este fenómeno, las reseñas y críticas que aparecen en las webs de las tiendas on-line no son el primer criterio a tener en cuenta a la hora de elegir un título. La publicidad más que las reseñas positivas o negativas es la que ayuda a vender un libro. Pero nuestros editores son reacios a pagar publicidad, de manera que, para conocer las veces que un libro aparece en la prensa escrita, algunos editores están suscritos a “agencias de seguimiento de los medios” que les informan de los lugares donde se publicó un comentario positivo o negativo, la sección, el tamaño del mismo e incluso calculan el dinero que se ha ahorrado con esta publicidad gratuita.