
Como si de un personaje de Zafón se tratase, el bibliotecario de Brooklyn, Andrew Beccone, ha salvado de la destrucción 15.000 volúmenes de los más variados temas, con una característica en común: tener curiosas ilustraciones. Con ellos ha creado una pequeña biblioteca, que tiene diez años de existencia, y cuyo futuro parece asegurado, ya que cada vez recibe más fondos.
Este proyecto ha atraído la atención del mundo del arte, y actualmente, The Reanimation Library, que así se denomina, se exhibe en el MoMA, codeándose con artístas de la categoría de Ai Weiwei. En el museo, se ha reproducido la biblioteca original, y se presenta como un espacio interactivo, que explora la evolución de las artes impresas.
La biblioteca original ofrece a sus usuarios la posibilidad de consultar, fotocopiar y escanear los ejemplares de su interés, pero no ofrece préstamo. Facilita, así mismo, la consulta online a las personas interesadas, puesto que, de cada ejemplar recibido, se escanean varias imágenes para posteriormente clasificarlas por temas y ofrecerlas en un archivo en su página web.
Según el propio Beccone, que lucha por la supervivencia del libro, "el problema es que muchos libreros se han sentido amenazados por internet, pero yo me siento cómodo en ambos medios”.
Fotografía: MoMA