A
la hora de elaborar estos trabajos, la mayoría de los alumnos utilizan las
búsquedas en internet como la fuente principal de información. Esto que de por sí ya es un
problema, por la restricción de los resultados y por el uso de una información
a menudo no contrastada e incluso errónea,
se ve agravado con la incorporación de los resultados encontrados tal y
como están, el famoso “corta y pega”, o con la descarga de los trabajos
íntegros, cayendo en lo que se denomina plagio o “ciberplagio”, e incurriendo
no solo en una falta ética sino también en un delito.
Plagiar
según la Real Academia es “copiar en lo sustancial obras ajenas, dándolas como
propias”. Los medios legales que tienen los autores para luchar contra este
tipo de prácticas que atentan contra sus derechos morales e intelectuales son:
La ley de Propiedad Intelectual (Real Decreto legislativo 1/1996 de 12 de
abril, modificado por la Ley 5/1998 de 12 de abril), la ley reguladora del
Derecho de Rectificación (Ley Orgánica 2/1984 de 26 de marzo) e incluso el
Código Penal, art. 270.1, (Ley Orgánica 10/1995 de 23 de noviembre).
Detectar el
plagio no es una tarea fácil, pero desde las universidades se debe concienciar
a los alumnos de lo deshonesto de esta práctica, que puede acarrearles sanciones
y que supone un descrédito para ellos mismos y para la institución.
Cada
universidad ofrecer a sus usuarios, a través de sus bibliotecas, numerosos
recursos de información, que suponen un esfuerzo económico importante. Son las propias
bibliotecas quienes ponen a disposición de los usuarios los medios para acceder
a dichas fuentes, instruyen sobre el manejo de las mismas y sobre la selección
de la información.
Por esta
razón, el plagio va también contra las propias bibliotecas, ya que dinamita su
papel. Esta situación ha llevado a que muchas bibliotecas se hayan unido al
movimiento antiplagio, utilizando las páginas web para advertir sobre el uso
ético de la información, indicar la manera de realizar citas bibliográficas y
mostrar la legislación relativa a la protección de los derechos de autor.
Dos comisiones
sectoriales de la CRUE (Conferencia de Rectores de Universidades Españolas)
junto con REBIUN (Red de Bibliotecas Universitarias) han creado el portal CI2
(Competencias Informáticas e Informacionales) para la incorporación de estas
competencias transversales en las universidades españolas, de manera que “los
estudiantes adquieran los conocimientos necesarios para desenvolverse en la
sociedad del conocimiento y sean capaces de utilizar las TIC adecuadamente para
sí poder localizar, evaluar, utilizar y comunicar la información en cualquier
ámbito de especialización”.
Dentro de
este portal existen varios tutoriales entre los que queremos destacar el
producido por la Universidad de Sidney, traducido y adaptado por la CRUE,
REBIUN y TIC sobre “plagio y honestidad académica”, que os ofrecemos en el
siguiente enlace:
http://ci2.es/objetos-de-aprendizaje/tutorial-de-plagio
(Imagen tomada del blog: historias y fantasias)